El empresario Antonio Espaillat, propietario de la discoteca Jet Set, fue dejado detenido la tarde de este jueves tras presentarse voluntariamente en la Procuraduría General de la República (PGR), donde se le requirió para responder en torno al colapso del techo del centro nocturno, tragedia ocurrida el pasado 8 de abril y que dejó 236 muertos y más de 180 heridos.
El arresto fue confirmado por el abogado Jorge Luis Polanco, quien fuese su representante legal al inicio del proceso. Espaillat acudió a la sede del Ministerio Público acompañado de su hermana Maribel Espaillat y de su abogado, Miguel Valerio, apenas 24 horas después de que fuera entregado el informe técnico forense que detalla las causas del desplome de la estructura.